La salida de Romero Deshamps fue voluntaria: él pidió su renuncia. Si, quizás bajo presión del gobierno federal pero fue por él, no por los grupos nacientes que buscan la dirigencia del STPRM. No es un logro personal de algún grupo específico. Ahora, la dirigencia quedará en manos de Manuel Limón, (gente cercana a Romero Deshamps ), quien fungía como Secretario del Interior; mientras tanto, el resto de la secciones sindicales, siguen con sus secretarios generales. En mi opinión, la unidad permanecerá dentro del STPRM. La creación de tantos y tantos grupos disidentes ha provocado la pulverizaron de sus intenciones. Mientras tanto, creo que con estas acciones el presidente Andrés Manuel López Obrador ha cumplido sus compromisos: quitar a Romero Deshamps pero también respetar la autonomía sindical. De no haberlo hecho, cualquiera de quienes encabezan los grupos (perdí la cuenta cuántos son), ya hubieran asumido las dirigencias de las diferentes secciones sindicales. Pd. Saludo con cariño a mis amigos petroleros.