¿Es posible no enamorarse nunca?

8-Febrero-2017

Los cerebros de los amantes están inundados de un neurotransmisor -molécula que lleva mensajes entre neuronas- llamado dopamina. Ésta se cuece en el sistema límbico, la parte del cerebro más involucrada en las emociones. Las personas con el sistema neuroendocrino bien ajustado tarde o temprano se enamoran.

Es inevitable. Ahora bien, trastornos como la depresión y el autismo vienen de la mano de desajustes hormonales a nivel cerebral. Por ejemplo, una sobredosis de prolactina en el hombre y de andrógenos en la mujer alteran la capacidad afectiva. Lo mismo sucede con ciertos trastornos psicosomáticos, como la alexitemia.