Lactancia materna y COVID-19

7-Junio-2020

En el marco de la emergencia sanitaria por la COVID-19 la Coordinación de Lactancia Materna del Ministerio de Salud Pública (MSP) emitió una serie de recomendaciones a todos los integrantes de los equipos de salud del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS) referidas al manejo de la lactancia en consultorios y maternidades además de referirse a las consultas virtuales o telefónicas de acuerdo a la evidencia científica con la que se cuenta hasta el momento. Hasta la fecha no se ha documentado la trasmisión vertical del SARS-CoV-2. En las muestras de leche materna que se han tomado no se ha detectado el virus. El riesgo de contagio no sería a través de la leche como con otros virus respiratorios, sino por el contacto a través de gotitas respiratorias como ocurre inevitablemente entre la madre y su hijo. Lo que sí se conoce con vasta evidencia, es que la lactancia protege contra morbilidades y la mortalidad en el período postnatal y a lo largo de los primeros años de vida. El efecto protector de la leche materna es particularmente fuerte contra las enfermedades infecciosas, puesto que trasmite anticuerpos y otros factores antinfecciosos, con la trasferencia a largo plazo, de la memoria y competencia inmunológica. La leche materna además, es una fuente completa y óptima de nutrientes para todos los niños y tiene especial importancia desde la mirada de la seguridad alimentaria. El documento detalla las recomendaciones sobre lactancia que se deben tener en cuenta en las maternidades ante las diferentes situaciones: casos de mujeres con infección de escasa severidad, asintomáticas con infección confirmada o en caso de que la mujer esté en investigación de ser positiva o no y el recién nacido esté asintomático; mujeres sintomáticas con infección severa confirmada o en investigación y mujeres que amamantan, sintomáticas o asintomáticas que hayan tenido contacto con personas con COVID-19. Por otra parte, el documento hace énfasis en el apoyo psicológico y emocional que deben recibir todas las mujeres con lactantes o niños pequeños y sus familias, especialmente si sus niños también son casos sospechosos o confirmados para la COVID-19. Para las mujeres que amamantan y no tuvieron contacto ni enfermaron por la COVID-19, la recomendación fundamental es continuar con la lactancia siempre. Practicar estrictamente el distanciamiento social siempre que sea posible y de no serlo por razones laborales, implementar todas las medidas de prevención y control de la infección. Evitar el contacto con las poblaciones de riesgo, tal como se recomienda a la población general.