El Viernes Santo es una festividad cristiana en la cual se conmemora la muerte de Jesús de Nazaret. Se celebra durante la Semana Santa, después del Jueves Santo, y antes del Domingo de Resurrección o de Pascua.
Este día, la Iglesia católica manda a sus fieles, como penitencia, a guardar ayuno y abstinencia de carne. Tampoco se celebra la eucaristía, sino la liturgia de la Pasión del Señor.
El Viernes Santo es, fundamentalmente, un día de duelo durante el cual se recuerda la crucifixión de Jesucristo en el Calvario, quien se sacrifica para salvar del pecado a la humanidad y darle la vida eterna. De allí que la cruz se haya tomado como el símbolo de la gloria para la adoración de los cristianos.
A este respecto, escribe, en la Biblia, Pedro: “Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en el espíritu” (1 Pedro, 3: 18).
Costumbres de Viernes Santo
Cubrir imágenes de Jesús
Este día, en las iglesias, las imágenes —principalmente el crucifijo— se cubren con tela morada, en señal de la ausencia de Jesús.
La finalidad es dar a la liturgia la sobriedad característica del recogimiento al que llama la muerte de Jesús, y reflexionar sobre el misterio de la pasión, muerte y resurrección de Cristo.
Las imágenes se descubren el domingo de Pascua, como símbolo de la Resurrección de Jesús.
Vestir de luto a la Virgen María
La imagen de la Virgen María se viste de negro como muestra de su luto y profundo dolor por la muerte de Jesús. Algunos miembros de la parroquia también asumen este color de vestimenta para simbolizar el duelo.
Rezar el Vía Crucis
Es costumbre rezar el Vía Crucis, también conocido como Camino a la Cruz. Con este rezo, se acompaña a Jesús en sus horas finales, mientras se repasan los catorce momentos (o catorce estaciones), desde su condena hasta su muerte y sepultura.
Meditar sobre las 7 palabras de Jesús
Este día, también se medita sobre las siete palabras, las siete últimas palabras que Jesús pronunció en la cruz.
Los fieles reflexionan sobre el significado que pudieron tener e interpretan la forma en que estas se adaptan a las diferentes situaciones de la vida por las que pasa todo el mundo.
Adoración a la cruz
Es tradición participar en la liturgia de adoración a la cruz, con que se cierra la celebración litúrgica de la Muerte del Señor. La finalidad es acompañar a Jesús en el sufrimiento.
Rezar el Credo
A las tres de la tarde se suele recordar el momento de la crucifixión rezando el Credo de los Apóstoles.
Conmemoración de la muerte de Jesús
Durante la noche, se conmemora la muerte de Cristo con himnos solemnes, oraciones de acción de gracias, así como un mensaje centrado en el sufrimiento de Cristo por nosotros.
Representación del Vía Crucis
Es una de las tradiciones más populares del Viernes Santo, en ella son dramatizados, con actores, cada uno de los momentos más importantes del vía crucis de Jesús hasta la cima del monte del Calvario. Esta escenificación permite revivir el recorrido de Jesús hasta el Calvario.